125 AÑOS DEL C.E.P.
Una institución que sobrepasa el siglo de vida puede aspirar, con fundamento, a ser eterna de la frase, más que la aspiración de perpetuidad, hay que rescatar la idea de lo arduo que resulta para cualquier empresa humana recorrer cien años y seguir construyendo a diario su presente proyectándose al futuro.
El Colegio de Escribanos del Paraguay (CEP), desde sus modestos inicios, ha sobrepasado largamente su centenario y está cumpliendo 125 años. Hoy es la entidad gremial universitaria más antigua del Paraguay.
Con avances y retrocesos, luces y sombras, se ha mantenido en pie en el tiempo cumpliendo un relevante servicio a la sociedad paraguaya. Lo ha hecho a través de cada uno de sus integrantes e institucionalmente, como gremio de incuestionable responsabilidad social.
Si llegamos a este peldaño relevante de nuestra existencia como voluntades particulares solidarios reunidas en pos de un propósito colectivo es porque a lo largo de este lapso ha habido una suma exitosa de esfuerzos, talento, inteligencia y madurez para sostener el CEP en una atmósfera de constante desarrollo.
La historia es la acción humana reflejados en obras. Allí hoy aspiraciones y sueños que adquieren carácter objetivo mediante lo que es posible palpar y cuantificar. Ello queda en evidencia a través de las huellas e igualmente a través de los innumerables aportes a las Instituciones con las que la labor Notarial cupo desarrollarse para acompañar el avance de la tecnología.
En esta época de la tecnología en que el giro cultural pone a nuestra vista los medios digitales como única forma de difundir los valores, las informaciones y los conocimientos asumidos, el desafío para las nuevas generaciones. Tenemos la esperanza de que nuestro pensamiento de revalorizar y destacar la historia de nuestro Colegio para los más jóvenes a reflexionar sobre nuestra calidad de profesionales del derecho a cargo de una función pública observando el ideal supremo de aplicar la ciencia y la cultura como instrumento para cumplir la labor social que corresponde al notariado; de cubrir la necesidad humana de certeza y seguridad jurídica en las relaciones sociales.
Hablando de acciones que adquieren personalidad propia mediante situaciones concretas, es oportuno recordad que en coincidencia con los 125 años del CEP que festejamos, nuestra institución acaba de firmar un convenio con la Corte Suprema de Justicia para que en su edificio de O´Leary N°.590, funcione el Archivo de los Protocolos. De este modo cobra vigencia un proyecto largamente acariciado por dirigentes del Colegio de anteriores directivas. El archivo de los protocolos notariales podrá constituirse en el patrimonio orgánico más importante del Paraguay. He ahí el motivo de su indudable transcendencia.
Sea este espacio propicio para dar las gracias a los que ayer y hoy han contribuido a cincelar la grandeza del CEP. Llegar a los 125 años puede sostener con argumentos bien solidos la validez del aserto que señala que una institución humana que transponga los 100 años puede aspirar con legitimidad a perdurar en el tiempo.
Palabras de la Presidenta del Colegio de Escribanos del Paraguay, Notaria Pública ANA MANUELA GONZALEZ RAMOS.